Musica clasica
Bienvenidos al mejor portal de la musica elegante
tendras videos musica clasica.

Mp3



Pero entre esas pequeñas piezas se encuentran el Andante para teclado en do mayor, Köchel Verzeichnis (KV) 1a, y el Allegro para teclado en do mayor, KV 1b.


Pero Cuando Wolfgang Amadeus tenía cuatro años tocaba el clavicordio y componía pequeñas obras de considerable dificultad; a los seis, tocaba con destreza el clavecín y el violín.


Se podía leer música a primera vista, tenía una memoria prodigiosa y una inagotable capacidad para improvisar frases musicales.


Pero en conclusion no era un niño común. Su progenitor era un hombre inteligente, orgulloso y religioso.


El creía y sabia que los dones musicales de su hijo eran un milagro divino que él, como padre, tenía la obligación de cultivar.


Pero cuando mozart iba cumplir 6 años de edad, Leopold decidió exhibir las dotes musicales de sus hijos ante las principales cortes de Europa.


Sin embargo según los primeros biógrafos de Wolfgang, su padre «quiso compartir con el mundo el milagroso talento de su hijo...». Leopold creyó que proclamar este milagro al mundo era un deber hacia su país, su príncipe y su Dios, por lo que tenía que mostrarlo a la alta sociedad europea, ya que de otra manera él sería la criatura más ingrata.




Pero el biógrafo Maynard Solomon afirma que mientras Leopold era un profesor fiel a sus hijos, existen evidencias de que Wolfgang trabajaba duramente para avanzar más allá de lo que le enseñaban.


Pero una de sus primeras composiciónes impresa y sus esfuerzos precoces con el violín fueron por iniciativa propia y Leopold se vio fuertemente sorprendido.


Pero el padre e hijo tenían una relación muy estrecha y estos logros de niñez hicieron llorar de alegría a Leopold más de una vez.


Pero Finalmente Leopold dejó de componer cuando el excepcional talento musical de su hijo se hizo evidente.


Ya que el era el único profesor de Wolfgang en sus primeros años y le enseñó música, así como el resto de asignaturas académicas.


Aunque en los años en los que Mozart se estaba formando su familia realizó varios viajes por Europa, en los cuales mostraron a él y a su hermana Nannerl como niños prodigio.


Mozart y su familia partió hacia Múnich, comenzando con una exhibición en la corte del príncipe elector de Baviera Maximiliano III y más tarde en el mismo año en la corte imperial de José II de Habsburgo en Viena y Praga.


Ya que la permanencia en la ciudad de Viena, uno de los principales centros de la música en esa época, culminó con dos recitales ante la familia imperial en el palacio de Schönbrunn.


Pero el pequeño Wolfgang causaba sensación en cada concierto, aunque el dinero recolectado en este viaje no fue tanto como los elogios recibidos. Podría decirse que éste fue un viaje de prueba para Leopold.